que no te quieres encontrar al girar la calle.
Decía que se usaba sentido común. Y he aquí cómo: Carcharos del Jurásico superior sólo se conoce Veterupristisaurus de Tanzania. Los Megalos eran MUCHO más abundantes en aquel tiempo. Y si echamos un vistazo a las áreas más cercanas y de edad semejante, encontramos al propio Megalosaurus en Reino Unido y a Torvosaurus en Portugal. Así que todo apunta a que el gran carnívoro de las faunas ibéricas jurásicas era un megalosaurio.
Un megalosaurio gigantón alimentándose de un pobre turiasaurio. FCPTD-FG. |
Pero además, otros fósiles de mega-carnívoros han sido estudiados y publicados por paleontólogos de la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis y la Universidad de Colorado Denver. Se trata de un rastro con grandes huellas tridáctilas, pues casi alcanzan 60 cm de longitud, y un gran diente, procedentes de El Castellar y Formiche Alto (Teruel, España), respectivamente. Ambos hallazgos se enmarcan en sedimentos de la Formación Villar del Arzobispo (Titoniense-Berriasiense, tránsito Jurásico-Cretácico, con unos 145 millones de años de antigüedad). Las huellas tridáctilas estudiadas, localizadas en el yacimiento El Castellar, poseen características únicas en comparación con otras huellas producidas por grandes carnívoros en cualquier parte del mundo. Por este motivo, en el estudio científico se define un nuevo tipo de huellas: Iberosauripus grandis (“pie del lagarto ibérico grande”). Además, en este estudio se divide las huellas de grandes terópodos del Jurásico Superior de Europa, Norteamérica y Asia en dos grupos distintos, cuyos productores fueron probablemente terópodos alosáuridos y megalosáuridos. ¡Fíjate tú, los dos morfotipos mayores de dientes que ya se identificaron!
Réplica de las huellas de Iberosauripus en el Museo Aragonés de Paleontología (Dinópolis). FCPT-D. |
Por otro lado, el nuevo diente procedente de Formiche Alto se atribuye a un dinosaurio terópodo megalosáurido, como otros tres grandes dientes de Riodeva y Galve (Teruel) y de Alpuente (Valencia). Este tipo de dinosaurios pudo llegar a alcanzar los 12 metros de longitud y poseían dientes de hasta 10 cm de corona. Gracias al análisis de dichos rastros de huellas y dientes, se concluye que las faunas de dinosaurios del Jurásico superior y tránsito Jurásico-Cretácico en esta parte de España incluyen, al menos, dos tipos de dinosaurios carnívoros de gran tamaño. Además, la presión depredadora de estos terópodos pudo ser una de las causas decisivas para estimular el crecimiento hasta tamaños gigantescos de algunos dinosaurios comedores de plantas, como el saurópodo Turiasaurus riodevensis.
Por si esto fuera poco (que, obviamente no), ha salido otra publicación en que se define una nueva especie de Torvosaurus en Portugal. Según este trabajo, el megalosaurio luso recibe el nuevo nombre de Torvosaurus gurneyi, y se diferencia del Torvosaurus tanneri americano por diversas características en su osteología. Pero lo que es de importancia en este artículo para el tema que nos ocupa es que, segñun estos autores, T. gurneyi fue el mayor depredador del Jurásico en Europa. ¿A que mola cuando las investigaciones de equipos diferentes apuntan en una misma dirección?
Reconstrucción de T. gurneyi. ¡Bicharraco! Hendrickx & Mateus 2014. |
Por lo tanto, en las faunas finijurásicas de Europa, y en especial de la Península Ibérica hubo un gran carnívoro que no tenía nada que envidiar al famosísimo Tyrannosaurus rex. ¡Que quede claro!
Referencias:
– Cobos, A. et al. 2014. Megatheropods as apex predators in the typically Jurassic ecosystems of the Villar del Arzobispo Formation (Iberian Range, Spain). Palaeogeography, Palaeoclimatology, Palaeoecology 399:31-41.
– Hendrickx, C. & Mateus, O. 2014. Torvosaurus gurneyi n. sp., the Largest Terrestrial Predator from Europe, and a Proposed Terminology of the Maxilla Anatomy in Nonavian Theropods. PLoS ONE 9(3): e88905.